16 septiembre, 2009

El hueso como elemento artístico

Al inicio se trabajó con algunas imágenes en donde se representó a un ente mágico, elemental; que en circunstancias normales no se deja ver, pero una vez dadas las condiciones, decide emerger desde el nicho en el que se encuentra, se manifiesta mostrando ingenuamente su interioridad. Esa representación se ha plasmado en lienzos de mediano a gran formato, en técnica mixta, igualmente se han elaborado varias planchas para grabados tanto en xilografías como en planchas de bronce grabadas al ácido nítrico; las impresiones graficas hasta ahora se han elaborado de manera artesanal – sin prensa – aunque está planteada la posibilidad de hacer próximamente un tiraje formal con todos los lineamientos en cuanto a numeración y otras formalidades.
Refiere Bartolomé de Las Casas (1484-1566), fraile dominico español, cronista, teólogo, obispo de Chiapas (México) y gran defensor de los indios, que en sus primeros recuerdos sobre el Nuevo Mundo estaría siempre la impresión que dejó en él siendo un niño, cuando vio por primera vez a nuestros indígenas portar máscaras elaboradas con huesos de pescado

"(…) la imagen de aquellos siete indios, que acompañaban al descubridor el 31 de marzo de 1493 en Sevilla, (…) los cuales yo vide en Sevilla y posaban junto al arco que se dice de las imágenes, situado junto a la iglesia de San Nicolás. Llevó papagayos verdes, muy hermosos y coloreados y guaizas, que eran unas carátulas hechas de pedrería de huesos de pescado”. Bartolomé de Las Casas

Bartolomé de Las Casas, por su parte, incansablemente batalló contra las brutales penalidades a que eran sometidos los hombres y mujeres de América. Quizá más que ningún otro peninsular, atravesó hasta 12 veces el Atlántico para defender ante la Corona la causa de los americanos. En torno a la conquista de México, el padre Las Casas dijo:

“(...) en el descubrimiento se hicieron grandes [barbaridades] con los indios (...) En el año 1518 la fueron a robar y a matar los que se llaman cristianos, aunque ellos dicen que van a poblar. (...) ha rebasado y llegado al colmo toda iniquidad, toda injusticia, toda violencia y tiranía”. Bartolomé de Las Casas